Las personas usuarias de la Asociación Paz y Bien también disfrutan del verano. Un total de 46 del servicio de menores y 105 de los servicios residenciales han pasado por nuestra residencia de tiempo libre, ubicada en la localidad onubense de Galaroza.

Estas instalaciones se corresponden con la casa de respiro de la congregación Capuchina, cedida a Paz y Bien por un alquiler simbólico durante 99 años. Se trata de una casa tradicional, localizada en una de las calles principales del pueblo, donde se ha creado un ambiente de familia ya que nuestros chavales son amigos de todos los vecinos y son maravillosamente acogidos por ellos.

Tal es el arraigo con la zona que uno de los primeros premios que recibió la entidad fue el Pero de Oro, otorgado por el Ayuntamiento de Galaroza en 1999, motivo por el cual la entidad se vio moralmente obligada a intervenir en las comarcas de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche y El Andévalo.

A pesar de la situación de crisis, la entidad ha hecho de nuevo un esfuerzo en pos de aquellos que no tienen oportunidad de disfrutar de sus vacaciones, con un amplio programa de actividades que han asegurado la diversión y el descanso de las personas con discapacidad intelectual que forman parte de Paz y Bien.