En muchas ocasiones hemos hablado de la importancia del vínculo entre dos personas. En el marco de nuestra asociación entre la persona usuaria y el personal de atención directa. Y es que difícilmente podremos explicar este binomio con palabras, sobre todo cuando queremos cuantificar la afectividad, y lo más significativo de todo, la repercusión que tiene en la calidad de vida de las personas a las que acompañamos.

A falta de palabras, un grupo de personas de los servicios de día de Alcalá de Guadaíra -bajo la privilegiada mente creativa de Miguel Ángel Calero, educador en este centro- se pusieron manos a la obra para crear una obra teatral sin fronteras, incluso nos atreveríamos a decir que sin precedentes. Después de meses de trabajo junto con personas grandes dependientes de nuestros servicios–protagonistas de esta representación-, el Teatro Gutiérrez de Alba, situado en la localidad panadera, acogió ayer la inauguración del Teatro ‘Hilos’, coincidiendo con la ‘XXIII Muestra de Teatro Infantil y Juvenil José Muñoz Castillejo’, organizada por el Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra. El delegado de cultura, Germán Terrón, estuvo presente en el acto de presentación y agradeció “la implicación de la Asociación Paz y Bien con el pueblo de Alcalá”, así como lo orgulloso que se sentía de “presentar una obra en la que personas con discapacidad intelectual son los protagonistas, siendo la prueba del compromiso con la sociedad”.

El ilustre dramaturgo Gutiérrez de Alba hubiera respirado aires de ejemplaridad al pisar la moqueta del teatro que lleva su nombre. Una madera que crujía a medida que el público iba acomodándose en unas butacas forradas de un terciopelo verde que se mezclaba con el azul de los pañuelos de Paz y Bien, y en los que el lema “creamos ilusiones, creamos sonrisas” estaría más presente que nunca.

No había detalle que pudiera pasar por desapercibido. Llegó la hora y la luz comenzó a atenuarse mientras nuestras azafatas y azafatos cerraban las puertas. Al ritmo de los tambores de ‘Safri Duo’, los títeres -alumnos y alumnas en prácticas- antes petrificados por toda la sala, cobraron vida para subirse al compás que marcaba la percusión. Una vez sobre el escenario sonó la orquesta de ‘Mi gran noche’ y aparecieron sobre las tablas dos personas muy queridas en nuestra entidad. Con una métrica y movimientos marcados fueron llegando al centro Salud Rodríguez, directora de los servicios de día de Alcalá de Guadaíra, y Andrés Fernández, persona usuaria de la UEDTO Mª Luisa de Velasco, quienes dieron paso al vídeo de presentación con el que se hizo un repaso de los 30 años de Paz y Bien en Alcalá. Se cerró el telón y el mismo Andrés fue el encargado de presentar la obra ‘Hilos’. Se volvió a subir el telón y comenzó la representación. A partir de aquí faltan palabras para describir lo que vendría. El despliegue artístico expuesto a través de las diferentes escenas fue simplemente brillante. Profesionales y personas usuarias representaron por parejas alegorías en torno a la motivación, el arte, el tiempo, la vida, la alegría, el silencio, el amor…Todas envueltas por la pasión que une a cada uno de ellos.

La línea de ‘Hilos’ hace una crítica al sector de la sociedad que intenta controlar a los demás y cómo las personas deben ser las únicas capaces de tomar sus propias decisiones. Lo que no contempla por escrito el guion de esta obra es la pasión con la que se desenvuelven los protagonistas, el sentimiento que desprenden los actores y las actrices, y cómo impregnan en el alma de los presentes la pureza de sus rostros. La obra recoge los sentimientos de las personas usuarias que participan. Su felicidad, su esfuerzo, sus lágrimas, sus capacidades. Y es que una vez más han demostrado de lo que son capaces. Han reflejado sus posibilidades cuando la persona que les acompaña no usurpan su voluntad y sí ayudan a estos a tomar sus propias decisiones.

El hilo que unió ayer el corazón de los presentes es lo que mueve esta asociación, pues este teatro representa la filosofía de un grupo de personas dedicadas en cuerpo y alma a mejorar la vida de personas en riesgo de exclusión social. Las tablas del Gutiérrez de Alba fueron testigo de esta pasión con la que se trabaja por los demás. Esperamos verlos pronto en muchos escenarios más.